Add parallel Print Page Options

Se acuestan en camas de marfil,
se recuestan en cómodos divanes,
comen los corderos del rebaño
y los terneros que sacan del establo.
Canturrean al son del arpa
y, siguiendo el ejemplo de David,
inventan instrumentos musicales.
Beben vino en grandes copas
y se ungen con olorosos aceites,
sin que les duela el desastre de José.

Read full chapter